Arqueología del Noroeste de México: Un "Rudo Ensayo"

David Phillips

Paleoindios o Paleoamericanos

¿Horizonte Pre-Paleoindio?

En base a sus estudios en la Sierra Pinacate del noroeste de Sonora, Julian Hayden (1975) propuso la existencia de una etapa cultural pre-punta de proyectil (30,000 a 11,500 AP [Antes del presente]). Su evidencia consistió de hallazgos de superficien cuyos edades se estimaron sin fechas directas. Esta forma de razonamiento se consideraba más adecuado antes del acceso general a fechas de radiocarbono.

Cultura Clovis

La primera ocupación averiguada de la región fue por los cazadores Clovis, cuyos puntos de proyectil distintas se han encontrados en muchos sitios en Sonora. Gaines et al. (2009) proveen un resumen de la arqueología Clovis de aquel estado (ver también Holliday et al. 2007; Montané 1985; Sánchez 2001). La cultura Clovis es parte de la etapa cultural de los "Paleoamericanos," que entre los arqueólogos del norte de México y de Norteamérica tipicamente se llaman por su sinónimo "Paleoindios."

En las décadas entre 1960 y 1980, Manuel Robles de la Universidad de Sonora (trabajando con la asistencia de voluntarios) identificó 11 sitios Clovis en Sonora y estudió uno de ellos, el Bajío (SON:K:1:3), en más detalle (Robles 1974; Robles y Manzo 1972). Después, Kenneth y Marian McIntyre (1974, 1976) y Julio Montané trabajaron en el sitio. Las collecciones resultantes fueron analizados por Guadalupe Sánches (2001; Holliday et al. 2007). Estudios addicionales en 2003 incluyeron un reconocimiento sistemático y excavación de tricheras, pozos de prueba, y concentraciones de artefactos (Gaines et al. 2009; Sánchez 2001, 2004; Sánchez y Carpenter 2003). El Bajío es "el sitio Clovis mejor conocido y mas extenso reportado en Méxio" (Gaines et al. 2009:309). Cubre más de 4 km cuadrados y además incluye restos más recientes. El sitio sirvió como cantera para basalto vitrificado, pero los restos indican actividades diversas. El sitio se encuentra en la cuenca del río San Miguel, al norte de Hermosillo (Gaines et al. 2009).

Al sureste de Hermosillo, en la cuenca del río Mátape, el sitio SON:O:3:1 cubre un área de 2.5 por 1.5 km. Uno de los voluntarios de Robles descubrió y coleccionó el sitio, que se estudió en forma más intensiva en 2005. Estos esfuerzos han resultado en la colección de cientos de artefactos Clovis. El sitio también contiene restos más recientes.

Los sitios Clovis ocurren en las llanuras costales de Sonora. Al suroeste de Hermosillo, el sitio SON:N:11:20–21 extiende por el margen de una laguna seca y por un campo de dunas, cubriendo (aunque en forma descontinua) un área de más de 10 km cuadrados. El sitio fue coleccionado por más de 30 años, con pruebas arqueológicas en 2007. Lost restos indican que "el mantenimiento y reemplazo de puntas de proyectil fueron actividades principales" (Gaines et al. 2009:316–317), probablemente apoyando la caza en las inmediaciones del sitio. Algunos puntos no acanalados sugieren que Paleoindios mas tardíos quizás usaron el sitio. Otro sitio costal, SON:J:16:8, cae al oeste de Hermosillo (Gaines et al. 2009, Figura 1; Sánchez 2001; ver también Di Peso 1955). Es imporante reconocer que durante el Pleistoceno terminal, el nivel del mar era más bajo y que cualquier sitio costal auténtico de la cultura Clovis se ha ahogado.

Di Peso (1955) reportó un sitio Clovis al norte de Guaymas, pero Gaines et al. (2009:320) no pudieron localizar el sitio. Más al norte, Carpenter (2009) menciona un punto Clovis completa, y otra incompleta, del sitio la Playa, mejor conocida por sos restos del periodo Agricultura Temprana.

Según la reseña de Gaines et al. (2009), los sitios y las puntas aisladas de la cultura Clovis ocurren en una zona que extiende desde Guaymas hacia el norte. Hallazgos de la misma cultura también se han hecho en en Sinaloa:

Arturo Guevara (1989) documentó dos puntas de proyectil acanaladas en la región de Sinaloa de Leyva y Bebelama ... También se conservan cuatro bifaciales lanceolados con lasqueos sobrepasados de filo a filo de percusión directa, serguramente relacionados con el periodo Paleoindio Clovis, en las colecciones del Museo Regional del Évora en Guamuchíl ... La gran cantidad de sitios paleoindios reconocidos en Sonora, así como la distribuciión de puntas de proyectil Clovis que continúa hasta Jalisco, surgiere que probablemente la costa del Pacífico jugó un papel importante en el movimiento de grupos paleoindios hacia el Sur (Carpenter y Sánchez 2008:23).

Los restos de la cultura Clovis son casi desconocidos al este de la Sierra Madre Oriental, quizás en parte por razón de los grandes lagos del periodo Pleistoceno tardío y del Holoceno temprano, donde en la actualidad, encontramos cuencas cerradas con barreales o "playas" [lechos secos de lagos].) Los lagos nunca cubrieron más de 5 a 20 perciento del área de cada cuenca [vea Allen 2005], pero los reconocimientos tendrán que enfocar en las orillas ancianas para localizar los sitios tempranos, como hizo Marrs (1949). Tomando en consideración los numerosos hallazgos de restos Clovis en el "talón" de Nuevo México y sus cercanías en los EE.UU., Paul y Suzanne Fish (2006) sugieren que con más estudios, más sitios Paleoindios se encontrarán al este de la sierra. Hasta ahora se han hallado puntas Clovis en el norte de Chihuahua (Di Peso 1965; Phelps 1990), cerca de la laguna Bustillos en el centro de Chihuahua (MacWilliams 2001:130), y en Durango (Lorenzo 1953).

Otros Grupos Paleoindios

Carpenter y Sánchez (2008:23) encontraron "una punta indicativa del periodo Paleoindio tardío en las cercanías de Balácachi" en 2004, y mencionan tres bifaciales "con posible filiación paleoindia en la Casa de la Cultura Conrado Espinosa en Los Mochis."

Gaines et al. (2009:330) notan la "ausencia de artefactos Folsom" en Sonora, y sugieren es porqué la cultura Folsom fué una tradición del las "Grandes Llanuras" de Norteamérica. En contraste, Aveleyra (1961) reportó un fragmento de punta Folsom de Chihuahua, y otros hallazgos también sugieren la presencia de Paleoindios tardíos en Chihuahua. Un abrigo cerca de Santa Isabel, al suroeste de la ciudad de Chihuahua, incluyó depósitos basales que proporcionaron una punta de proyectil tipo "Plainview" y una fecha de radiocarbono de 9120 ± 50 AP (MacWilliams et al. 2008:42). El Proyecto Arqueológico de Chihuahua encontró un punto Paleoindio en la calle de una aldea cerca de la laguna Bustillos.

En la zona de la Sierra Pinacate, Hayden (1967, 1976) halló sitios de la cultura San Dieguito. Los restos indican el uso de recursos marítimos del Golfo de California.

¿Restos Humanos?

Los restos humanos paleoindios todavía han de encontrar en el noroeste de México, con la excepción posible del cráneo "Chinobampo" del sur de Sonora (Aveleyra 1964).


Link: Holliday et al. 2007, sobre los paleoindios en Sonora.


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Última revisión: 8 de julio 2009.
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